Marzo de 2024 fue el mes más húmedo en la Tierra desde que hay registros, un experto de Nueva Zelanda analiza las causas

Según afirma el meteorólogo Ben Noll, el pasado mes de marzo fue el más húmedo en la Tierra desde que hay registros. Esta variable podría estar ligada al cambio climático y a eventos como las recientes lluvias torrenciales en Dubái.

Inundaciones cambio climático
Los episodios de inundaciones podrían volverse más frecuentes en un planeta con mayores cantidades de agua precipitable

El pasado mes de marzo, fue el más húmedo jamás registrado en la Tierra desde que se toman registros, antes de 1940. Según datos estimados por ERA5, la humedad atmosférica media global llegó a las 0,73 pulgadas, que vendrían a ser unos 1,85 centímetros.

En concreto, la variable medida es el agua precipitable, también conocida como agua total en la columna, porque representa la cantidad total de humedad contenida en una columna de aire que se extiende desde la superficie terrestre hasta el techo de la atmósfera.

Ben Noll, meteorólogo en el Instituto del Agua e Investigación Atmosférica en Nueva Zelanda, es el que está llevando el seguimiento y quien se percató del récord. Según afirma Noll, el pasado mes de marzo, un 67% de la Tierra manifestó anomalías positivas de agua precipitable.

En extensiones equivalentes a toda Australia, el agua precipitable llegó a anomalías de 120%, con valores que se salen de la escala. Destacan especialmente la península arábiga, la costa este de EE. UU., Groenlandia y Europa, incluyendo España.

Marzo fue extremadamente lluvioso en España

Una de las manifestaciones de esta enorme disponibilidad de agua precipitable es el superávit pluviométrico que se ha dado en muchas zonas del mundo. Según un informe de la AEMET, en marzo la media fue de 120 l/m2 en España, por lo que llovió un 202% de lo que suele caer en el primer mes de la primavera climatológica.

La anomalía más importante se dio en la Península, mientras que en ambos archipiélagos el mes fue normal o húmedo. En Baleares cayó un 109% de la precipitación normal y en Canarias un 115%. Parte de la anomalía se debe al paso de la borrasca Nelson, que dejó hasta 72 l/m2 en Ceuta en 24 horas. En Ceuta el acumulado mensual asciende a 287 l/m2 y 255 l/m2 en Santiago de Compostela.

Aunque aquí hablamos de medias, marzo fue poco agraciado en la costa mediterránea y sureste. Las continuas situaciones de poniente dejaron mínimos pluviométricos en Almería, Región de Murcia y Comunidad Valenciana, donde no llovió ni la mitad de lo que sería esperable en un mes de marzo, aunque ya sabemos que los promedios en estas regiones no son muy representativos en primavera.

Un planeta cada vez más húmedo

Volviendo al récord de agua precipitable registrado a nivel mundial el pasado marzo, el meteorólogo Ben Noll atribuye una atmósfera de cada vez más húmeda al cambio climático. La razón principal radica en los mares y océanos, cada vez más calientes, debido a que actúan como enormes reservas de calor. El superávit de calor se traduce en una mayor tasa de evaporación y un aumento del agua precipitable atmosférica.

Ello puede derivar en episodios de lluvias torrenciales como el acaecido el pasado 16 de abril en la ciudad de Dubái. En el aeropuerto internacional de dicha ciudad se acumularon 159 l/m2 en 24 horas, un valor que triplica la cantidad que suele caer en todo un año.

Episodios como este podrían volverse más frecuentes en un planeta con mayores cantidades de agua precipitable. De hecho, según datos de Ben Noll, la humedad atmosférica en Dubái, ha aumentado un 7% en las últimas ocho décadas.