Por qué deberías ponerle bicarbonato a tus plantas de interior: una ingeniera agrónoma analiza sus beneficios

Se trata de un remedio casero y económico: el bicarbonato de sodio puede ayudar a controlar hongos, plagas y equilibrar el pH de tus plantas de interior.

bicarbonato para las plantas
El bicarbonato de sodio, un ingrediente común en la cocina, puede convertirse en un aliado útil, aunque delicado, en el cuidado de tus plantas.

En el mundo de la jardinería casera, el bicarbonato de sodio ha ganado popularidad como un remedio natural para diversos problemas que afectan a las plantas de interior. Desde la prevención de enfermedades fúngicas hasta la neutralización de olores desagradables en el sustrato, este compuesto común en la cocina ofrece múltiples beneficios cuando se utiliza correctamente.

Sin embargo, es crucial comprender que, a pesar de sus ventajas, el uso inadecuado o excesivo del bicarbonato puede causar daños a las plantas, como quemaduras en las hojas o alteraciones en el equilibrio del suelo.

Propiedades antifúngicas

Uno de los usos más respaldados del bicarbonato de sodio en jardinería es su capacidad para actuar como fungicida. Este efecto se debe principalmente a que altera el pH de la superficie de las hojas, creando un entorno alcalino poco favorable para la germinación y el desarrollo de esporas fúngicas.

spray bicarbonato
El bicarbonato eleva el pH en la superficie de las hojas, bloqueando la germinación de esporas fúngicas como las del oídio.

Los hongos como el oídio (blanco polvoriento), el mildiu y la roya prosperan en ambientes ligeramente ácidos y húmedos. El bicarbonato, al elevar el pH en el microambiente foliar, interfiere con su metabolismo, impidiendo que las esporas germinen correctamente. Además, su aplicación constante puede dificultar la formación de micelio, es decir, el cuerpo vegetativo del hongo.

Aunque el bicarbonato no elimina hongos ya bien establecidos, es eficaz como tratamiento preventivo y de control inicial.

Cómo preparar un fungicida casero

  1. Disolver 1 cucharadita de bicarbonato de sodio en 1 litro de agua.
  2. Agregar unas gotas de jabón neutro para mejorar la adherencia.
  3. Pulverizar la solución sobre las hojas afectadas, evitando las horas de mayor insolación.

Este tratamiento puede aplicarse una vez por semana en períodos de mayor humedad ambiental o si se detectan las primeras señales de infección fúngica.

Control de plagas y neutralización de olores

Aunque el bicarbonato no es un insecticida en el sentido estricto, puede colaborar en el manejo de plagas de forma indirecta. En algunos casos, el aumento del pH en la superficie de las hojas hace que estas se vuelvan menos atractivas para insectos como pulgones, trips o cochinillas, que prefieren tejidos tiernos y con pH más estable. Además, cuando se combina con aceites vegetales o jabón potásico, el bicarbonato puede potenciar el efecto desecante y de asfixia de estas mezclas sobre plagas de cutícula blanda.

Su acción, sin embargo, no es fulminante ni universal, por lo que debe ser parte de una estrategia integrada de control. Un beneficio adicional es su capacidad para neutralizar olores derivados de la descomposición de materia orgánica en el sustrato, como raíces en mal estado o restos de fertilizante orgánico en descomposición. Este efecto desodorizante es útil sobre todo en macetas de interior que acumulan humedad o carecen de ventilación.

Aplicación

  • Espolvorear ligeramente sobre la superficie del sustrato, evitando el contacto directo con tallos y hojas.
  • No repitas más de una vez al mes, ya que podría alterar el equilibrio del suelo.

    Precauciones y contraindicaciones

    Si bien el bicarbonato de sodio puede ser beneficioso para las plantas de interior, su uso indebido o en exceso puede causar más daño que beneficio. Es esencial seguir ciertas precauciones para evitar efectos adversos.

    • Sobreacumulación de sodio: el uso excesivo puede llevar a una acumulación de sodio en el suelo, lo que puede afectar la absorción de nutrientes por parte de las plantas y deteriorar la calidad del sustrato, incluso puede generar clorosis o “quemaduras” en las raíces.
    Clorosis
    Demasiado bicarbonato puede hacer que tus plantas se vean enfermas: cuidado con la clorosis por deficiencia de hierro.
    • Pruebas previas: antes de tratamientos generales, aplica el spray en 2–3 hojas y espera 24 h. Si aparecen manchas o amarillamiento, reduce la dosis.
    • Alternativa recomendada: el bicarbonato de potasio (KHC O₃) es más efectivo y menos fitotóxico que el de sodio, especialmente al 1% o más de concentración.
    • Evitar el Sol directo: pulverizar siempre en horas de menos radiación (mañana temprano o atardecer) para evitar quemaduras en la cutícula.

    En resumen, el bicarbonato de sodio puede ser un recurso útil en el cuidado de las plantas de interior, siempre que se utilice con moderación y siguiendo las recomendaciones adecuadas.

    Referencia de la noticia

    - Heraldo. (2025). Por qué se recomienda poner bicarbonato a las plantas de casa.

    - Jardinería Plantas y Flores. (2025). Bicarbonato de sodio en las plantas: Uso Correcto.