Calendario astronómico de octubre: Super Luna de la cosecha, Oriónidas y conjunciones planetarias
El cielo de octubre nos regala un espectáculo de planetas brillantes, lluvias de meteoros y desafíos de observación que, nos esperan recordándonos que la astronomía está al alcance de cualquier par de ojos curiosos.

Cuando levantas la vista en octubre, ¿sientes esa inmensidad que nos envuelve desde el espacio? Este mes el cosmos nos invita a un recorrido estelar inolvidable, con espectáculos celestes que van de lo familiar a lo sorprendente.
Para celebrar 35 años de descubrimientos, la NASA propone el “Hubble’s Night Sky Challenge”. Se trata de localizar, con binoculares o un pequeño telescopio, algunos de los objetos más icónicos fotografiados por el Telescopio Espacial Hubble, desde nebulosas hasta galaxias distantes.
En el Hemisferio Norte, octubre ofrece varios cúmulos globulares al alcance de aficionados, como M2 y M30. Aunque pequeños y tenues, hallarlos es un reto gratificante, pues conecta la observación amateur con la tradición científica que el Hubble ha consolidado en el cielo profundo.
Eso sí, recuerda que la visibilidad de cada objeto depende de tu latitud. Algunos pueden disfrutarse casi desde cualquier lugar, pero otros se limitan a zonas específicas, por lo que no olvides revisar guías locales para asegurarte de qué tesoros celestes podrás admirar desde tu ubicación.

Los planetas también tienen un papel destacado este mes. Empezando por Saturno que domina las noches, visible al este tras la puesta del Sol con sus anillos que siguen siendo un espectáculo único. Mercurio y Marte se acercan en el suroeste, desafiando a quienes disfrutan del crepúsculo con binoculares en mano.
La Luna de Cosecha y las lluvias de meteoros
Este mes seremos testigos de una Súper Luna de Cosecha, la primera de cuatro superlunas consecutivas. El plenilunio ocurrirá entre la noche del 6 y la madrugada del 7 de octubre de 2025 (10:48 p.m. CDT), muy cerca de Saturno en el firmamento. Una oportunidad perfecta para observar la interacción entre dos gigantes celestes.
Se le llama superluna porque, el 8 de octubre, la Luna alcanzará su perigeo, el punto más cercano a la Tierra en su órbita elíptica, a 359,819 km de distancia. Dos semanas después, el 24 de octubre, llegará al apogeo, su punto más lejano, marcando un contraste que resalta la danza orbital de nuestro satélite.
Octubre también nos regala dos lluvias de estrellas:
- Los Dracónidas, que alcanzarán su pico entre la tarde del 8 y la madrugada del 9. Sin embargo, la intensa luz de una Luna menguante limitará la visibilidad a unos pocos meteoros por hora; si dejas oculta la Luna tras un árbol o edificio mejorará tu experiencia.
- Las Oriónidas, serán más generosas. Su máximo llegará el 21 de octubre bajo cielos oscuros gracias a la fase de luna nueva. Con origen aparente en la constelación de Orión, cerca de Betelgeuse, podrían observarse entre 10 y 20 meteoros por hora. Una cita imperdible con restos del cometa Halley.
Guía de planetas al amanecer y al anochecer
En los atardeceres de octubre, Saturno será el protagonista, aunque Mercurio y Marte se dejarán ver bajos en el suroeste. Marte se vuelve cada vez más esquivo y el 29, Mercurio alcanzará su máxima elongación vespertina, ofreciendo en el Hemisferio Sur la mejor oportunidad del año para detectarlo.
Entre el 20 y el 21 de octubre, Mercurio y Marte se aproximarán a solo dos grados de distancia en el cielo. Localizar a Marte será complicado por su baja posición, pero con binoculares puede lograrse. Debemos tomar en cuenta que a inicios de noviembre quedará fuera de la vista nocturna.

Si eres de madrugar, octubre te recompensará con un espectáculo brillante cuando Venus aparezca bajo en el Este, resplandeciendo cerca del horizonte, mientras Júpiter brillará alto en el cielo matutino, entre Cástor y Pólux en Géminis.
Quienes observen desde lugares muy oscuros en el Hemisferio Norte, podrán intentar ver la luz zodiacal antes del amanecer. Este fenómeno, un resplandor en forma de cono causado por polvo interplanetario, y que apunta hacia las estrellas más brillantes; ofreciendo un espectáculo raro y misterioso que puede apreciarse tras el ocaso mirando hacia el Sur.
Rutas de observación y recursos astronómicos
En las noches de octubre, la constelación de Casiopea, con su inconfundible forma de W, se alza al norte. Justo debajo, bajo cielos despejados, puede localizarse el Cúmulo Doble de Perseo, visible con binoculares. Observarlo es como abrir un libro de historia celeste que la humanidad ha leído durante milenios.
La Osa Menor, en cambio, permanece como brújula nocturna y, aunque la Osa Mayor esté baja o bajo el horizonte, sus dos estrellas exteriores apuntan siempre a Polaris, la Estrella Polar. Esta referencia ha guiado navegantes, exploradores y astrónomos, y sigue siendo una aliada invaluable para orientarse en el firmamento.
Más allá de las misiones espaciales y telescopios avanzados, la NASA fomenta la ciencia ciudadana y la divulgación. Programas educativos, entrenamientos en observatorios urbanos y proyectos colaborativos invitan a todos a participar en la exploración del universo desde su propio entorno local.
Para sacar el máximo provecho de estos fenómenos, conviene usar recursos digitales como Stellarium-Web, que muestra vistas del cielo personalizadas para tu ubicación. ¿Por qué no aceptar el reto del cielo de octubre y registrar tus propias observaciones? Tal vez incluso, podrías compartir tus capturas en nuestras redes sociales.