En junio comenzó la expedición a Groenlandia del Deep Carbon Lab de la Universidad de Bolonia para estudiar el hidrógeno natural, identificando así una posible fuente de energía limpia para las actividades humanas.
En junio comenzó la expedición a Groenlandia del Deep Carbon Lab de la Universidad de Bolonia para estudiar el hidrógeno natural, identificando así una posible fuente de energía limpia para las actividades humanas.
Según nuevas simulaciones, la Vía Láctea sólo tiene un 50 % de posibilidades de colisionar con Andrómeda.
Nuevos estudios revelan cómo las avalanchas submarinas se generan y desafían creencias previas sobre su origen.
Startups de todo el mundo participan en ensayos clínicos en un sector que podría cambiar vidas, y pueden estar más cerca de lo que crees.
Los peores efectos del cambio climático podrían minimizarse si se revierte rápidamente el objetivo de 1,5 °C establecido por el Acuerdo de París, según un nuevo estudio.
El hallazgo sugiere una conexión entre las señales precursoras PKP y el vulcanismo observado en regiones como Yellowstone, las islas hawaianas, Samoa, Islandia y las islas Galápagos.
Un nuevo yacimiento arqueológico, Abric Pizarro, en las estribaciones de los Pirineos meridionales, está ayudando a los arqueólogos a comprender un período poco conocido de la historia de los neandertales y les está dando pistas sobre su caída.
Estas semillas fosilizadas pertenecen a una especie extinta de leguminosas y podrían ayudar a explicar la evolución de las selvas tropicales actuales en el sudeste asiático y Australia.
Los científicos han descubierto un nuevo tipo de onda electromagnética que transporta una gran cantidad de energía a la magnetosfera, impactando en el cinturón de radiación del planeta.
Utilizando grandes conjuntos de datos y un potente telescopio con cámara, los investigadores han resuelto recientemente un antiguo debate sobre si las galaxias que se agrupan unas alrededor de otras son más pequeñas o más grandes.
Se conocía que el agua potable no llega a toda la población mundial, pero hasta ahora no se sabía cómo se reparte su disposición geográficamente en el mundo y tampoco su grado de salubridad.
Se han identificado fragmentos de plástico a escala nanométrica en el cerebro humano. Y lo que es peor, la cantidad ha aumentado con el tiempo y un tipo particular de plástico parece ser propenso a acumularse en el cerebro.