3I/ATLAS, el visitante interestelar que desconcierta a los astrónomos de todo el mundo por su composición
A medida que el tercer objeto interestelar confirmado hasta ahora, 3I/ATLAS, avanza a gran velocidad hacia las profundidades de nuestro sistema solar, los investigadores que utilizan el telescopio espacial James Webb han revelado resultados sorprendentes respecto de su composición.

El 1 de julio de 2025, el telescopio de sondeo ATLAS, financiado por la NASA, descubrió 3I/ATLAS en Chile. Su trayectoria hiperbólica reveló que su origen se encuentra fuera de nuestro sistema solar. A medida que el objeto se acerca cada vez más al Sol, algunos de nuestros telescopios más potentes están dirigiendo su atención hacia su dirección.
El tiempo para estudiar el objeto es limitado, ya que abandonará el sistema solar en cuestión de meses y no regresará jamás. Mientras se desplaza por el espacio a velocidades superiores a 210.000 km/h —la velocidad más rápida jamás registrada en nuestro sistema solar—, el telescopio Hubble y SPHEREx lo han observado con más detalle.

Investigadores de la NASA, el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) y varias universidades han estado estudiando imágenes del Telescopio Espacial James Webb (JWST) y su espectrógrafo a bordo. El espectrógrafo dispersa la luz que emite un objeto en un espectro. Este espectro es una especie de huella química, cuyo análisis puede revelar datos cruciales sobre la temperatura, la masa y la composición química del objeto.
Los hallazgos del JWST y sus implicaciones
Uno de los hallazgos más sorprendentes es la alta proporción de dióxido de carbono a agua en la coma de 3I/ATLAS. De hecho, la más alta jamás registrada en un cometa.
3I/ATLAS is no ordinary comet... it came from beyond our solar system. NASAs SPHEREx mission recently observed this interstellar visitor, teaming up with @NASAWebb and @NASAHubble, to reveal more about its size, physical properties and chemical makeup: https://t.co/CafpSz7SQF pic.twitter.com/PWOVHRebly
NASA 360 (@NASA360) August 26, 2025
A medida que los cometas se acercan a una estrella, como el Sol, el calor extremo que penetra en su núcleo provoca la desgasificación química de los gases del objeto hacia su coma. En este caso, el estudio de la coma de 3I/ATLAS reveló la presencia de dióxido de carbono, agua, hielo de agua, monóxido de carbono y sulfuro de carbonilo.
La relación más alta de dióxido de carbono a vapor de agua
Las cantidades relativamente altas y bajas de dióxido de carbono y vapor de agua, respectivamente, podrían revelar más sobre la formación y el origen de 3I/ATLAS. Una hipótesis del estudio es la formación del cometa dentro de la línea de hielo de dióxido de carbono de su disco protoplanetario.
Un disco protoplanetario es una nube de gas, polvo y hielo que se forma alrededor de una estrella recién nacida, a partir de la cual se forman planetas, lunas, asteroides y cometas. Si 3I/ATLAS se formó dentro de la línea de hielo de dióxido de carbono, las temperaturas fueron lo suficientemente bajas como para que el CO₂ se solidificara, lo que resultaría en un mayor contenido de dióxido de carbono en su núcleo.
Alternativamente, las menores cantidades de vapor de agua podrían significar que otro elemento del contenido del núcleo podría estar protegiendo al núcleo helado del intenso calor directo del Sol. Este blindaje evitaría que el vapor de agua se desgasifique en la coma del cometa.
BREAKING - 3I/Atlas reveals a classic comet tail in the most recent images taken on 27, August, 2025 pic.twitter.com/L1f7eIkpHF
— All day Astronomy (@forallcurious) August 30, 2025
Los investigadores también reconocieron que los objetos interestelares están expuestos a una radiación más intensa al viajar por el espacio interestelar, lo que también podría explicar la composición observada. Las observaciones de 3I/ATLAS continuarán hasta septiembre, momento en el que el cometa estará demasiado cerca del Sol para un estudio significativo.