Las misiones a Marte con Starship pueden reducirse a solo tres meses
Un nuevo estudio desafía lo que creíamos posible y es que podríamos llegar a Marte en sólo tres meses usando tecnología actual. ¿La clave? El actual cohete Starship de SpaceX.

Durante décadas, viajar a Marte ha significado pasar entre seis y nueve meses flotando en el espacio, una duración que supone grandes riesgos para los astronautas debido a la radiación, pérdida de masa ósea y aislamiento extremo, sin embargo, un nuevo estudio propone una alternativa mucho más rápida.
El físico Jack Kingdon, de la Universidad de California, analizó si el Starship de SpaceX podría acortar drásticamente ese tiempo y según su modelo, usando rutas bien calculadas y combustible suficiente, se podría llegar a Marte en solo 90 días, y lo mejor es que no se necesitan tecnologías experimentales.
La propuesta no incluye motores futuristas de plasma ni propulsión nuclear, simplemente utiliza el sistema actual de SpaceX, que ya ha sido probado en órbita, donde la clave radica en repostar el cohete en el espacio y realizar maniobras de aerofrenado al llegar a Marte.
Esto abre la puerta a misiones más seguras, rápidas y viables en el corto plazo. Algo impensable hace apenas unos años podría convertirse en la nueva normalidad para la exploración espacial humana para, incluso, empezar a construir bases en el planeta rojo.

Funcionamiento de la misión
El plan incluye enviar dos naves tripuladas y varias naves de carga, todas lanzadas desde la Tierra en un corto período, para posteriormente cargar combustible en órbita cerca de Marte usando otras Starship que actuarían como tanques de carga, algo así como una gasolinera espacial.
Una vez llenas, las naves partirían hacia Marte en fechas clave en 2033 y 2035 cuando la trayectoria calculada reduciría al máximo el uso de combustible sin comprometer la velocidad ni la seguridad. El estudio muestra que es posible, pero requiere condiciones térmicas estables.
El combustible necesario para volver se produciría en Marte, a partir del hielo y dióxido de carbono local en un proceso llamado ISRU, es parte central del plan y una tecnología que SpaceX ya está desarrollando.
Al llegar, el Starship realizaría una maniobra de aerocaptura usando la atmósfera marciana para frenar, sin necesidad de grandes cantidades de propulsor. Luego, los astronautas podrían aterrizar, investigar y preparar el regreso.
Menos riesgos, más salud
Reducir el viaje de tres meses tendría un impacto positivo enorme en la salud de los astronautas ya que la exposición a la radiación cósmica se reduciría a la mitad, y también se mitigaría la pérdida ósea causada por la microgravedad.
Según el estudio, la dosis de radiación durante el viaje se mantendría por debajo del límite permitido por la NASA, lo que significa que más astronautas podrían participar en misiones futuras sin superar su “presupuesto” de exposición vitalicia.

Además, llegar en mejores condiciones físicas facilitaría las tareas en Marte, como instalar laboratorios, recolectar muestras o iniciar la construcción de hábitats porque cada gramo de masa ósea que se conserve, cuenta. La trayectoria más corta no sólo protege al cuerpo humano, también permite planear misiones más frecuentes y menos costosas, lo que acelera toda la carrera hacia la colonización marciana.
¿Qué falta para hacerlo realidad?
Aunque el estudio es prometedor, todavía hay obstáculos, por ejemplo, se necesitaría una cadencia de lanzamiento altísima, es decir, unos 45 lanzamientos de Starship en pocas semanas, además del almacenamiento de combustible criogénico durante tres meses en el espacio que también es un desafío técnico.
También se requiere una planta funcional de ISRU en Marte, capaz de producir metano y oxígeno en cantidades suficientes, pues aunque el proceso es conocido aquí en la Tierra, aún no se ha probado en condiciones reales, por lo que será un paso crucial antes de pensar en misiones tripuladas con retorno desde el planeta rojo.
Otro desafío es la entrada atmosférica, puesunque las simulaciones sugieren que si bien el escudo térmico de Starship puede resistir las altas temperaturas del frenado en Marte y en la Tierra, aún faltan pruebas reales desde velocidades interplanetarias por lo que la ingeniería térmica sigue siendo una incógnita crítica.
Pese a todo, lo asombroso es que esta propuesta no depende de tecnología futurista, si SpaceX avanza con su plan de vuelos frecuentes y logra madurar el uso de recursos locales, podríamos ver misiones humanas de ida y vuelta a Marte en plazos y condiciones mucho más razonables.
Referencia de la nota:
Kingdon, J. "3 months transit time to Mars for human missions using SpaceX Starship". Sci Rep 15, 17764 (2025). https://doi.org/10.1038/s41598-025-00565-7