¿Se acabará el universo? Algunos científicos creen haber encontrado la respuesta

¿Qué pasaría si la constante cosmológica, que hoy es positiva, se volviera negativa? Basándose en esta teoría, un equipo de investigadores ha logrado modelar el fin de nuestro universo.

Universo
Según un nuevo estudio, el universo podría llegar a su fin algún día, aunque es muy probable que nosotros ya no estemos aquí para verlo.

Un equipo de investigadores internacionales se ha preguntado sobre la posible fecha del fin del universo, basándose en particular en nuevas teorías sobre la energía oscura que lo compone.

La importancia de la constante cosmológica

La constante cosmológica es un parámetro añadido por Albert Einstein en febrero de 1917 a sus ecuaciones de relatividad general para hacer compatible su teoría con su idea entonces presente de un universo estático.

Actualmente se acepta comúnmente que si la constante cosmológica, denotada por λ, es positiva, actúa como una fuerza que contribuye a la expansión del universo. Por el contrario, si es negativa, actúa como una fuerza que causa la "contracción del universo". Por lo tanto, la constante cosmológica se considera candidata a la famosa energía oscura.

De hecho, la energía oscura es una forma hipotética de energía que llena uniformemente todo el universo, comportándose como una fuerza gravitacional repulsiva. En otras palabras, contribuye, como se mencionó anteriormente, a la expansión del universo. Esta energía oscura no debe confundirse con la materia oscura, que no llena uniformemente el universo y que normalmente interactúa con la gravedad.

En los últimos años, numerosos estudios han sugerido que la energía oscura evoluciona con el tiempo, lo que significa que λ puede cambiar de positivo (como ocurre hoy) a negativo. Científicos estadounidenses, chinos y españoles han estado investigando las consecuencias de dicho cambio, consecuencias que bien podrían conducir al fin de nuestro universo.

¿Un universo con final?

Los investigadores utilizaron el comportamiento de los axiones para modelar un universo impulsado por la energía oscura con λ negativo. Los axiones son partículas hipotéticas de muy baja masa que conformarían la materia oscura (una teoría aún por demostrar).

Con lo que sabemos sobre estas partículas, los investigadores modelaron su evolución con el tiempo en estas condiciones. Si inicialmente actúan como fuerzas de expansión, como ocurre actualmente, podrían perder fuerza después de unos miles de millones de años y, por lo tanto, actuar como fuerzas de atracción (es entonces cuando el λ negativo tomaría el control).

Como resultado, estos axiones precipitarían al universo entero a su caída, una caída que los científicos llaman Big Crunch (en contraposición al Big Bang). Según el estudio en cuestión, parecería que este fin programado del universo ocurrirá en unos 22.000 millones de años, lo que significa que, con toda seguridad, ya no estaremos presentes para observarlo, sabiendo que la Tierra debería ser absorbida por la inevitable expansión de nuestro Sol en 7.500 millones de años durante su evolución hacia una gigante roja.

Esta hipótesis del Big Crunch, según la cual toda la materia del universo debería agruparse en una sola masa en 22.000 millones de años, sigue siendo, sin embargo, una teoría. Varias variables, como los axiones e incluso la energía oscura en general, siguen siendo hipotéticas por el momento. Para confirmar esta nueva teoría, será necesario realizar más investigaciones en el futuro para determinar si nuestro universo realmente terminará algún día o si continuará expandiéndose como ocurre actualmente.

Referencia de la notícia

Des scientifiques auraient trouvé la date de la fin de l'Univers, et l'échéance approche, Geo (10/10/2025), Lola Breton